Una
de las principales claves para aumentar la dificultad en tus ejercicios es el peso. Cuanta
más resistencia le ofrezcas a tu cuerpo, más complicado y
fatigoso serán tus rutinas. Cuando veas que estás estancada o que te
aburres con tus ejercicios, prueba a ir añadiendo peso
para elevar la dificultad y para que tus músculos vuelvan a activarse. Por
supuesto, los de tus glúteos no van a ser una excepción:
1. Peso muerto
rumano: Este ejercicio es uno
de los más recomendados (e infravalorados) para nuestros glúteos. Y de propina
también para nuestros femorales (sí, los músculos que están 'detrás' de los cuádriceps).
Empieza acostumbrándote con la barra sin peso y ve añadiendo poco a poco según
transcurran las semanas. Te sorprenderán los kilos que puedes llegar a cargar.
3. Puente con peso: El clásico ejercicio de puente, con una
dificultad añadida: más peso. Puedes empezar poniendo un disco de dos kilos en
tu abdomen y, cuando estés preparada, incrementar su valor con una barra con
discos apoyada en tu abdomen. Vigila la respiración y procura subir tu cuerpo
de manera armónica y no 'ladeando'.
4. Sentadillas con
salto: Lógicamente, tampoco vamos a prescindir de
nuestras sentadillas en esta lista de ejercicios difíciles para glúteos. Pero
esta vez, en lugar de añadir peso, les vamos a añadir otro componente: el
salto. Conseguiremos que este ejercicio se convierta en aeróbico y 'quemaremos'
más grasa que nunca. El salto no tiene que ser especialmente grande, sino que
más bien te lo tienes que tomar como un 'relax' y estirar los brazos hacia
atrás.
...Y cuando quieras darle una dificultad aún
mayor, salta estirando los brazos hacia los extremos. Tu postura saltando
debería parecer una estrella de cinco puntas.
Como siempre, antes de realizar ejercicios que no
hayas hecho o de
una dificultad grande, consúltalo con tu entrenador o monitor de gimnasio.